Nota de Katherine Correa y Rosario Acevedo publicada originalmente por Emol
El crimen organizado de las drogas y la forma de adquirir armas se cuentan entre los factores del alza de estos ilícitos, según los expertos. Conoce más.
Un joven herido a bala llegó el jueves pasado al Centro de Salud Familiar (Cesfam) Padre Pierre Dubois de la comuna de Pedro Aguirre Cerda, ubicado en la población La Victoria para recibir atención, sin embargo, la situación no llegó hasta ahí. Según funcionarios del centro de salud, un grupo de personas armadas ingresaron a “rematarlo”.
La policía que llegó al lugar detalló que el joven de 19 años transitaba cerca del Cesfam y recibió impactos balísticos a las afueras de un jardín infantil cercano. Según el coronel de la Prefectura de Rinconada, Gonzalo Pereira, “el sujeto llegó por sus medios acá y falleció al interior”.
El mes pasado, el subsecretario de Prevención del Delito, Eduardo Vergara, demostró su preocupación ante el aumento de la violencia en el país, afirmando que “es el peor momento”, de la seguridad en Chile desde 1990.
El ex jefe de la División de Seguridad Pública de la Subsecretaría de Prevención del Delito, Jorge Araya, menciona que “en los últimos 15 años hubo un cambio muy marcado en el tipo de violencia”, algunas de las diferencias que ha observado hoy el experto son:
- Crimen organizado en torno al tráfico de drogas.
- Sicariato.
- Muertes por encargo.
- Bandas organizadas con alto nivel en armas sofisticadas.
- Portonazos.
- Enfrentamientos armados.
Son dos los factores que explican este cambio, según Araya:
- Acceso a drogas: “Fue creciendo el acceso a las drogas en las poblaciones, ya que aquel que es consumidor cuando se vuelve adicto necesita mezclarse con estos grupos para financiar su adicción, y termina siendo parte de las mismas bandas”.
- Nuevo procedimiento para adquirir armas: “Hace algunos años, más del 40% de las armas eran declaradas ‘extraviadas’, y creo que eso es porque los delincuentes usaban palos blancos, es decir, que gente sin antecedentes penales compraba armas y luego las declaraba extraviadas, para que así ellos las adquirieran”.
Respecto a los factores que menciona el ex jefe de la División de Seguridad Pública, según información solicitada por el medio Fast Check a Transparencia, en Chile hay más de 18 mil armas “perdidas” por civiles entre el 2017 al 2020, y de las cuales solo se han recuperado un 2%. En cuanto al narcotráfico, el Informe 2021 del Observatorio del Narcotráfico de la Fiscalía Nacional, el titular de la institución, Jorge Abbott, mencionó que “nuestro país enfrenta por primera vez la amenaza de la instalación en Chile de carteles internacionales de droga, que no conocíamos hasta ahora”.
Las cifras
Según la última cuenta pública de Carabineros de Chile, los ilícitos e incautaciones realizadas por la institución son los siguientes:
- Delitos de mayor connotación social: Incluye homicidios, violaciones, lesiones, robos y hurtos. Se produjeron 324.137 casos
- Robo con violencia: De los 13.409 casos que ocurrieron en 2021, un 81% de ellos ocurre en la vía pública.
- Armas de fuego incautadas: Se incautó un total de 1.962 armas cortas y largas.
Este año, según el último boletín policial de Carabineros realizado entre enero y el 1 de mayo, se incautaron más de 7.500 kilos de drogas y alrededor de mil armas de fuego. Además desarticularon 284 bandas.
La investigadora del Instituto Milenio de Investigación sobre Violencia y Democracia (VioDemos) y del Centro de Estudios en Conflicto y Cohesión Social (COES), Alejandra Luneke, menciona que desde el Gobierno “están tratando de hacer la trazabilidad de la cantidad de objetos ilegales ingresados al país”, pero estima que Aduana, tiene entre el 5% y 8% de trazabilidad de cuáles son las mercancías que están ingresando.
¿Por qué se da un rápido alza de estos delitos actualmente? El factor pandemia:
El rápido incremento de estos ilícitos después de la pandemia, se da según el experto en seguridad pública porque había “una especie de trabajo acumulado por parte de los delincuentes, ya que antes habían sobrevivido con otras alternativas”, y ahora al tener las condiciones para delinquir, es peor, añade. Los fenómenos ya no solo abarcan la delincuencia común, dice Araya, sino que además crimen organizado, y violencia urbana a ciertos grupos radicalizados.
Según la investigadora de VioDemos y COES, la apertura de fronteras es la responsable del aumento de estos crímenes post pandemia, ya que “básicamente hay una reapertura de los mercados en todo sentido: formal, informal e ilegal”. Es por esto que recalca que “hay que analizar el confinamiento y desconfinamiento en el problema”.
Los más afectados
El jueves pasado se dio a conocer el video que muestra a parvularias del jardín aledaño al Cesfam de la comuna de Pedro Aguirre Cerda, cantando y manteniendo a los niños acostados mientras se escuchan los disparos de fondo, para evitar una tragedia. “La cantidad de muertes que se produce de gente inocente porque le llegó una bala loca, al ocurrir en un espacio urbano, es una situación bastante preocupante”, dice Jorge Araya, y menciona que las comunas más afectadas son las con “mucha vulnerabilidad social y desigualdad”, tales como
- Pudahuel
- Renca
- Cerro Navia
- La Pintana
- Lo Espejo
- Pedro Aguirre Cerda
“Lamentablemente tienen como común denominador, que estos amplios sectores de la población viven en precariedad social, lo que ha hecho que los mismos traficantes puedan incluir a estas gente en sus redes de tráfico”.
Luneke concuerda, pero añade que “en Santiago las zonas críticas están en el sur y poniente. Y (a nivel) regional: el norte de Chile. La segunda y tercera región son más afectadas que la cuarta o la quinta.
Para mejorar esta situación el ex jefe de la División de Seguridad Pública de la Subsecretaría de Prevención del Delito, Jorge Araya, menciona que:
• “Debe haber una modernización y fortalecimiento de todas las instituciones ligadas a la prevención y control del delito”.
• “La tecnología y la inteligencia artificial pueden ayudar a que otros tipos de delitos se superen”.