COES

Por Rayén Condeza, Fernando Acuña, Cristóbal Edwards, Vitadu Passi, Gonzalo Recabarren, Eugenio Rodríguez, Joaquín Silva, Alejandra Vega y Francisca Vivanco
Publicado en El Mercurio

Señor Director:

Integramos un grupo de profesores de la UC, voluntarios como examinadores en la segunda aplicación de la PSU en un liceo de San Bernardo.

En los dos días de exámenes, fueron patentes las desiguales condiciones en que los jóvenes de Chile deben rendir esta prueba de selección, lo que nos parece que agrava la inequidad general del sistema educacional.

Además de la escasa e incierta información, la larga espera para permitir el ingreso al recinto y los retrasos en el inicio de las pruebas por falta de materiales u otras causas que ocurrieron en varios lugares del país, nos encontramos con salas oscuras que carecen de luz eléctrica y de ventilación adecuada para exámenes de hasta 2:40 horas de duración.

Estas desventajas se deben a una serie de problemas de organización y de precaria infraestructura.

Nos alegra que, finalmente, la gran mayoría de los jóvenes chilenos haya podido rendir la PSU. Pero nos apena ver a tantos adolescentes que sueñan con ingresar a la universidad que enfrentan condiciones adversas para poder competir en igualdad con otros postulantes.

Chile debe mejorar sustantivamente la calidad del sistema educativo primario y secundario para todos. Si no, la desigualdad, la injusticia y la marginación seguirán discriminando, y ya sabemos que eso fomenta la frustración, la rabia, el resentimiento y también la violencia.

Relacionados

[PRENSA] Chile, cada vez más cerca de decidir si entierra la Constitución de Augusto Pinochet

COES

[OPINIÓN] Nepotismo, amiguismo y la rabia de los que no son de ningún lote

COES

Convocatoria para Asistente de Investigación de Observatorio Desigualdades

COES
COES