Por Pablo Pérez Ahumada
Publicada en La Segunda
El debate laboral ha estado colonizado por la discusión sobre el proyecto de ley que pretende reducir la jornada de trabajo ordinaria de 45 a 40 horas. Un cambio de este tipo es de gran trascendencia, tanto para empresarios como trabajadores. Por ello, es de suma relevancia analizar las consecuencias de políticas como esta basados en evidencia empírica. Solo de esa manera será posible elevar el nivel de un debate que, hasta ahora, parece no estar a la altura.
Una buena forma de comenzar a hacerlo es analizando experiencias previas. El resultado del debate legislativo en 2000-2001 se tradujo en una reforma que redujo la jornada de 48 a 45 horas. En esos años, diversos sectores del mundo político y empresarial advirtieron que un cambio de este tipo traería efectos altamente nocivos para el crecimiento económico, la inversión privada y la generación de empleo. Afirmaciones similares se escucharon cuando la reducción de la jornada laboral fue implementada en 2005. ¿Ocurrió efectivamente lo que se vaticinaba? La respuesta es simple: no. En 2001 el crecimiento del PIB fue de 3,3%, y este fue aumentando en los años siguientes, llegando hasta 7,2% en 2004. Más aún, al año siguiente de implementada la reducción de la jornada (2006), el crecimiento del PIB llegó a 6,3%. A riesgo de ser repetitivo, las cifras muestran fenómenos similares en términos de la tasa de desempleo: entre 2001 y 2007 ella se redujo de 10,4% a 8,4%. Tendencias similares y de más largo plazo pueden ser vistas en otros países que implementaron políticas similares.
Lamentablemente, las declaraciones escuchadas en el debate por la reducción de la jornada laboral sugieren que en Chile estamos lejos de pensar la protección de los y las trabajadoras como parte de estrategias más amplias de desarrollo nacional. De continuar así, seguirán abundando las referencias a “copas Américas” o a “incendios forestales” y se perderá, una vez más, la oportunidad de discutir políticas públicas de largo plazo que contribuyan al bienestar de todos los involucrados en el debate laboral. Para profundizar sobre este y otros temas realizaremos este viernes, en el aula magna de la de la Universidad Alberto Hurtado, el seminario “El debate por las #40 horas. Visiones desde las ciencias sociales”.